*Cada persona es lo que hace con lo que hicieron de ella.

miércoles, 31 de agosto de 2011

Máscaras

Finalmente, las máscaras son más codiciadas que las caras lavadas.
Las ojos maquillados, más que los recién levantados. Los vestidos con lentejuelas, más que los joggings y buzos. El sushi más que el sandwich de milanesa. Los hoteles de lujo, más que las carpas. El olor a perfume caro, más que el olor a jazmines. Los currículums largos, y las pilas de libros leídos; más que una buena charla compartida. Un buen discurso, más que una buena reflexión. La boca, más que los oídos. Los personajes, más que las personas.
Una gran oratoria, más que unas palabras honestas.

El mundo es novela, hecha de personajes más o menos redondos. Mi problema ni siquiera es que los personajes existan, sino, que los personajes siempre les terminen ganando a las personas reales.

Quizás el problema de las personas reales, es que nunca terminan de captar las reglas del juego. Pobres ellas.
Pobres.

La dignificación del hilito

El pullover no era nuevo. Pero tampoco tan viejo... Estaba en esos momentos intermedios diría, en esos donde ya lo usaste bastante (y se le nota, se le notan los lavados, los secados.. se le hicieron esas bolitas chiquitas, pero algunas eh, tampoco tantas); pero sigue siendo un gran pullover. Es de esos que te dan ganas de usar cuando tus amigas dirían que no corresponde, tipo, un viernes a la noche en una fiesta. Es de esos que los querés llevar a todos lados, esos que querés usar el sábado a la tarde andando en bici, o leyendo en un parque, pero maldecís haberlo llevado a la fiesta el viernes anterior, y ahora está lleno de olor a pucho y ni da usarlo.
Esos pulloveres que tienen sus manchas, pero también sus victorias. Seguramente lo usaste un par de ocasiones especiales, porque sabías que te iba a dar suerte.
El pullover, tiene tanta carga afectiva que empalaga.

Un dia...
Era de esos días donde no lo "necesitabas", donde no necesitabas ni mucha suerte, ni nada en especial. No te morías por usarlo particularmente, pero como lo querés tanto (tanta carga afectiva), lo usaste igual.

Cuestión, ibas caminando por ahí cual persona feliz-y-campante-con-su-pullover-preferido... hasta que pasa alguien (aquí puede ser un personaje particular, alguien no muy querido o querida, o tambien puede ser una persona que ni conocías y simplemente pasó por ahí a desestabilizarte la vida), y alguien, ese alguien, te dice: "uh, pará, tenés un hilito".

Con lo cual, empieza todo un circulo vicioso, una cadena interminable de viscicitudes imparables, un dominó rally incontrolable de sucesos que de pronto no podés (porque REALMENTE NO PODÉS) frenar, pausar o siquiera silenciar.

Que vení que te corto el hilito, que no, que dejá, que sí, que después se te va a hacer más largo, y te vas a enganchar con algo, y...

Supongamos que zafás de tan imcómoda situación (bastante usual por cierto, donde alguien en teoría quiere "hacerte un bien", pero claramente vos no querés ni necesitas nada de eso, al contrario)... Es muy muy poco probable que ahora puedas dejar de pensar en el hilito. Sí, ya sé, que yo me hacía la superada de los hilitos. "Que que tiene que haya hilitos", "Que quien dijo que hay que cortarlos todos" , "Que que represión social que limita cada hilito que se asome por ahí" , "Que que no me vengan a decir a mi que no me banco un hilito", "Que al contrario, que yo visibilizo y dignifico a los hilitos".

Les decía. El hilito no se te va de la cabeza. Y lo peor, lo peor de todo, es que pensas tanto, pensás tanto... que que los hilitos sí, que los hilitos no.. Y en ese minimo instante, en ese sutil momento donde te distrajiste con otra cosa...
ZAS.
Empezás a tirar del hilito. QUE POR QUÉ NO PODEMOS DEJAR LOS HILITOS ASÍ, COMO ESTÁN. Que no, que no, que tirás del hilito sin parar, y el pullover se frunce, se arruina, el hilito se engancha con otras cosas mientras se hace más y más largo.. Y a veces ya es muy tarde para arreglar el pullover, o lo arreglás pero no vuelve a ser el mismo, ese hilito deshilachado te hizo perder las lineas de la costura, o quedo todo desparejo y raro y uf. Y ahora te quedás con miedo de que ese hilito se vuelva a salir, aunque lo hayas cosido. Que a veces lo podés arreglar como si casi casi no hubiera pasado nada (nunca nunca creo q se puede hacer como si las cosas no hubieran pasado), pero te queda en la memoria la angustia y el miedo y la desesperación del hilito deshilachándose, y queda esa cicatriz en el pullover (y en tu recuerdo) (y en el de la historia de vos y el sweater).

Yo digo que alguna vez, no tiremos del hilito, lo dejemos ser, ahí como está, un hilito en diminutivo, chiquito, cortito. Porque tirar del hilito la mayoría de las veces, no sirve, sí angustia, sí genera conflictos que simple y solamente eran eso, hilitos.
(Pero mirá cómo tirando se transforman en algo mucho peor.)

Yo les advierto, cuidado con caer en la traicionera tentación de tirar de ellos.

martes, 30 de agosto de 2011

Conversaciones con Julio

Depresión? Angustia?

Ay, Julio, Julio. Si supieras (probablemente lo sepas), que hay rayos que atraviesan, y que te dejan estaqueada en el medio del patio, y que esos rayos no se llaman amor, es más, están muy muy lejos de eso... Quizás lo sabés, y me pregunto por qué no tenés una frase exactamente igual pero para hablar de esto otro. O quizás la tenés, y yo no la encontré. Y si no la tenés... qué importa?

Uf. Como si encontrar una frase tuya pudiera ayudar en algo. Ayudar... qué palabra rara, no? Quizás sea la palabra con significado más relativo que exista. No sé, voy a pensar al respecto. Pensá vos también, dale?

Qué cosa más fea, cuando todas las estanterías se caen juntas. En realidad (y lo peor), es que las estanterías no se caen (eso casi nunca pasa, Florencia), lo que se caen son los libros. Se caen todos los libros de las estanterías, a la vez. Pero las estanterías no.

Pero, pero... Ahora que lo pienso, no se caen todos juntos, tampoco de a uno. Se caen de a grupitos. Uy, miren: allá se cayeron un par. Y mirá, mirá, allá se estan por caer otros! Y para ese lado, en éste mismo momento, se estan cayendo otros tres. Y eso es lo más desesperante de todo, me parece.

Ni angustia, ni depresión, ni síndrome de la no sé qué mierda: dejemos de patologizar todo, y llamemos a las cosas por su nombre. La caída de libros, de a grupitos, durante un tiempo prolongado, pero no de las estanterías, es, lisa y llanamente, tristeza.

Pura y dura.

sábado, 20 de agosto de 2011

punto-superficie-punto-superficie-punto.
Quiero que, al menos por un rato, las cosas se den como yo quiero.

Ojala se cumplieran los deseos de cumpleaños, los deseos de panaderos. Los de los puentes con trenes pasando, los de los tréboles de 4 hojas. Los de la noche antes de dormirme. O, aunque sea, no sé, poder guardarlos en una cajita, hasta que puedan cumplirse. Pesan mucho sino, y mi espalda ya esta cansada. Además, es triste.

domingo, 14 de agosto de 2011

La culpa en el medio hospitalario

Va una semana de hospital, y noto que varias de las personas que están internadas sienten mucha mucha culpa por "estar enfermas". Particularmente hablo de un señor que tenía artitis reumatoide, y EPOC. La artritis es una enfermedad autoinmune, enfermedad de mierda si las hay, donde tu propio organismo ataca contra tus articulaciones, y no se sabe por qué pasa. Es decir, no hay causas conocidas. La EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica), es una enfermedad de los pulmones y las vías respiratorias en la que te cuesta que el aire salga. Es horrible, la gente siente como que se va quedando sin aire. Hay varias causas de EPOC, pero una de ellas es el cigarrillo, que al inflamar las vías respiratorias va haciendo que al oxígeno le cueste pasar desde los pulmones a la sangre. Este hombre no podía hacer prácticamente ninguna actividad, entre una u otra enfermedad. Y nos planteaba su situación actual como un merecido castigo por haber fumado. Nos dijo, primero, que cuando empezás a fumar de grande es porque "sos un pelotudo", pero luego nos comentó que cuando empezó él, se encontraba en una situacion familiar súper compleja, y bajo mucha presión.
El otro caso, era de un pibe muy joven, tenía convulsiones y se le habian encontrado lugares del cerebro a los que no les llegaba la sangre y otros lugares con ocupados por algo que todavía no se sabía qué era. El pibe consumía habitualmente cocaína, y también nos comentó algo así como que bueno, que ésto él sabía que le pasaba porque había consumido y que ahora se la tenía que bancar.

Me quedo pensando. Ya sabemos cómo la culpa mueve al mundo. Y pienso en éste caso dos cosas:
Hipótesis 1: la culpa estaría actuando como dispositivo de poder necesario para aceptar ciertos tratamientos invasivos, el aislamiento, el control que implica estar internado? O simplemente todo eso es onsecuencia del miedo y la desesperación? Como seria si estas personas no tuvieran culpa? Cuál es la función de la culpa en el medio hospitalario? O, cuál es la función de la culpa para que el SMH (sistema médico hegemónico) funcione?

Hipótesis 2: es posible hablar de medicina preventiva sin generar culpa? Reflexionemos sobre la prevención y la atención primaria. Tengo la hipótesis de que, según como viene funcionando hasta ahora, la medicina sanitarista y la epidemiología más que crear conciencia y prevenir malestares han creado culpa una vez que el malestar ya se ha instaurado.
Esto me genera una alarma enorme, porque yo quiero dedicarme a eso. Cómo, entonces, se cambia la perspectiva para generar otros resultados? Es acaso posible? O en realidad, mientras sigamos teniendo religión (religión en las mentalidades, con mucha culpa en relación al cuerpo y al placer), una atención primaria de la salud sin estos resultados resulta imposible?

fucking democracia, capitalista y burguesa

Que fucking hipocresía este sistema democrático.
No sé qué me da más bronca. Si la gente que vota y cree que con eso participa mucho, si la gente que no vota o impugna porque está en contra de éste sistema (y así se siente coherente pero no está cambiando las cosas), si la gente que, sin confiar en este sistema no hace nada para cambiarlo y sólo lo critica; o si la gente a la que no le importa este sistema y va inercialmente a votar para que las cosas sigan como están, o en todo caso mejoren, pero para su lado no más.

Cuestión: es difícil que alguien me caiga bien, al menos hoy.
Y lo peor peor de todo: es que yo tengo un poco de cada una de esas personas adentro. Y no encuentro cuál puede ser la opción superadora a todo eso. O sea, la bronca tambien es conmigo.
Es impotencia, es... GR.
Es que realmente no me satisface esto, ir a poner un sobrecito cada tanto en un buzon. El cambio, los cambios, están en otro lado. Pero esos otros lados son de a poco, son cotidianos, son pequeños, son a veces. Igualmente, son. Pero que hago con el buzón, mientras? Simplemente, me da bronca, y no sé bien qué carajo hacer con eso.

Igual, claramente, el grupo que más me duele, que es el más mayoritario, es el último. Me angustia, me duele, me irrita, y sobretodo, me desespera, porqué no sé cómo mierda se cambian esas lógicas. No sé como mierda se puede charlar y discutir con esa gente, cambiando de paradigma. No sé, y están en todos lados, al lado nuestro... Y, cómo se hace? Por donde se empieza? Eso, eso, esa es la pregunta. Por dónde se empieza?

- Creo que ni siquiera tiene que ver ni con Marx, ni con Foucault, ni con Butler, ni con Beauvoir. Nono. Tiene que ver con algo mucho más previo a eso..
- no sé, capaz me equivoco. Quizás sí tiene que ver con Marx, por ejemplo. O quizás Marx ayude... Quizás hacer un análisis de las desigualdades, y una genealogía sobre la producción de esas desigualdades ayude. Primero, visibilizar. Segundo, desnaturalizar. No sé
- Pero que no, que no creo que haya que caer en eso. No podemos caer en esa intelectualidad elitista de que si no leíste a Marx no vas a poder hacer un análisis sociológico., no vas a poder cuestionarte y desnaturalizar cosas
- Sí, bueno, pero por otro lado, vivimos tan tan enceguecidxs, que muchas veces el puntapié inicial para reflexionar es leer a alguien que piense cosas que vos nunca te habías puesto a pensar.
(...)
Esto se llama, señorxs y señorxs, esquizofrenia pura y dura.


sábado, 13 de agosto de 2011

Interrogatorio médico

Cómo se articula una buena atención médica, en la que es necesario conocer ciertas cuestiones historicas, bilogicas y contextuales de la persona que se atiende, sin estar siendo parte, a la vez, de un dispositivo de poder que controla y juzga a lxs individuxs?

Es posible?

sábado, 6 de agosto de 2011

Reflexiones y reafirmaciones, previas a una nueva etapa.

Ok. Nunca pensé que empezar a cursar en el hospital pudiera generarme TANTA angustia. Mis contradicciones internas se revuelven, se cagan a trompadas adentro mio.

Usando el ambo, ese uniforme policíaco que encarna al poder médico, me siento de pronto parte de ese sistema de dominación.

Estando ahí, con mi ambito lindo color azul, siento que estoy avalando todo un sistema simbólico que establece que es lo normal, y lo que no, que es sano y que es enfermo.

Me siento parte reproduciente de ese poder. Ese ambo implica un hola, soy una persona que avala este sistema. Soy la persona que "sabe". Sabe, lo que se considera saber. Por ende hay cosas que yo, con mi ambito azul petróleo, estoy diciendo: no son saber. Y entonces sigo avalando que ese Saber con mayúscula domine, controle, cuerpos y mentalidades, modos de ser, de estar y de vivir. Y yo, con mi ambito azul, avalo que los que no cumplan esos requisitos, los enfermxs, tengan que normalizarse, curarse. Y para ello hay dispositivos muy bien pensados, todo fundamentado con un sistema economico que lucra normalizando cuerposmentes. Todo esto, avalado por mí, y mi ambito (ambito como diminutivo de ambo, no de ámbito)


Entonces, qué hago con tanta angustia? Por qué estoy yo ahí?
Que no, que yo no quiero ejercer esa medicina. No quiero ser parte de eso. Yo estudio para ser profesional de la salud, no para ser médica.
La salud es un derecho humano. La salud es un bien social. Con la salud no se lucra. Con la salud no se domina. La salud es un valor positivo. Salud implica modos de vivir, acordes a cada persona. Una persona puede tener salud con lo que, para la medicina, es una enfermedad. Y una persona puede no tener salud, y para la medicina estar sana. La salud es una lucha. Es una creacion. Colectiva, pero también propia y subjetiva. Cambiante. Es un concepto dinámico.

Yo estoy ahí porque creo que puedo ser parte de un proceso que extienda a la salud como derecho. Que amplie el acceso a la salud. Que otras cosas puedan considerarse salud.

Yo quiero aprovechar el conjunto de saberes sobre salud para socializarlos, y que cada quien pueda tener su salud. Porque no voy a negar, que la medicina aporte herramientas, claro. Hay que aprovecharlas, las herramientas de todos los tipos de medicina (porque medicina no hay una sola, no es la medicina hegemónica la única), para poder construir salud. Yo solo quiero ser parte de ese proceso.


Bueno, Florencia, ante esa angustia: recordá por favor, que es por eso que mañana a las 8 vas con un ambo al hospital de Clínicas.






lunes, 1 de agosto de 2011

El machismo es PRO

http://www.perfil.com/contenidos/2011/08/01/noticia_0016.html


No es muy original, ya. Valorar a una mujer en la política, porque es linda en bikini, o, tener que verselas con el marido cuando se la elogia... Ya ni ganas me dan de hablar al respecto. Solo lo subo, como denuncia al asco que me genera esta gente. En fin.